Crónicas del Paraíso
Bajo Presión Records
2011
Disponible en: bandcamp.com
( 7.1 )
Cinco años pasaron desde que Trinky debutó en la escena con "Humilde Morada" (2006) para que la banda volviera a sacudir las mentes del público con su inconfundible mezcla de ska/hardcore gamberro. El grupo hace se regreso con "Crónicas del Paraíso", segundo LP de su carrera, que brinda una nueva dosis de descontrol y energía con ritmos de ska a 100 mph, furiosos riffs de guitarra y descargas de expresión. A decir verdad, muy poco ha cambiado en la música de Trinky, considerando el espacio de tiempo que separa a ambas grabaciones. Evidentemente, Trinky no es una banda que evoluciona en su naturaleza musical; más bien se apegan a lo que saben hacer mejor y sacan el mejor provecho de ello.
El grupo en sí se mantiene intacto, y no podría ser de otra manera. La identidad de la banda esta tan arraigada a la personalidad de sus cuatro integrantes que Trinky dejaría de ser Trinky si se llegara a remplazar a alguno de ellos. El vocalista Roberto Mosquera, siempre arrollador en su entrega, arroja letras de rebelión y levantamiento frente a un sistema social que se resiste al cambio, a la tolerancia y a la aceptación común. El impulso de lucha detrás de "Crónicas" se condensa completamente en la línea central de "Vivir": "Tenemos el poder de cambiar nuestra realidad". El cambio nace con el despertar de nuestra consciencia, y se consolida únicamente a través de nuestra acción, denuncia y compromiso. En los instrumentos, Enrique Irungaray (guitarra), Fredy Guillermo (bajo) y Emmanuel Gálvez (batería) se encargan de poner a bailar a quien los oiga con el ritmo contagioso e inescapable que caracteriza a la música de Trinky.
El grupo en sí se mantiene intacto, y no podría ser de otra manera. La identidad de la banda esta tan arraigada a la personalidad de sus cuatro integrantes que Trinky dejaría de ser Trinky si se llegara a remplazar a alguno de ellos. El vocalista Roberto Mosquera, siempre arrollador en su entrega, arroja letras de rebelión y levantamiento frente a un sistema social que se resiste al cambio, a la tolerancia y a la aceptación común. El impulso de lucha detrás de "Crónicas" se condensa completamente en la línea central de "Vivir": "Tenemos el poder de cambiar nuestra realidad". El cambio nace con el despertar de nuestra consciencia, y se consolida únicamente a través de nuestra acción, denuncia y compromiso. En los instrumentos, Enrique Irungaray (guitarra), Fredy Guillermo (bajo) y Emmanuel Gálvez (batería) se encargan de poner a bailar a quien los oiga con el ritmo contagioso e inescapable que caracteriza a la música de Trinky.
'Bailando se entiende la gente' dijo alguien alguna vez. La frase bien podría ser el lema de Trinky, y es que el disfrute de esta banda se potencia al máximo en colectividad. No negaré que el grupo suena bastante bien en el estudio, pero simplemente no se compara con escucharlos en el escenario, reventando amplificadores a todo volumen, en medio de una horda enloquecida de adolescentes envueltos en bailes orgiásticos y destrozando el lugar a ritmo de ska y metal. Es como una buena sesión de cardio, solo que con más moretones al final. En definitiva, Trinky es una banda que hay que experimentar en vivo.
El grupo hace de "Crónicas del Paraíso" una ventana hacia sus vivencias y andanzas en la vida, pero tampoco es inusual encontrar en la música de Trinky historias que van más allá de lo personal. Desde odas a íconos futboleros y mujeres con desordenes alimenticios hasta amoríos de muerto-vivientes, "Crónicas" parece tener una canción para todo. Temas como "Vivir", "Fight!" y "Hell Hole" son ya clásicos de Trinky y de los que más frecuentemente suenan en sus toques. "What I hate" y "After the storm" es Trinky en modalidad punk, mientras que "Pork Chop Girl" y "Saturday Ska" (cover de The Misfits) bajan en decibelios y demuestran que incluso un grupo tan arrebatado como Trinky puede tocar también con gentileza.
Después del ska intenso de "Hasta la mierda" (y de darle 'next' al track 7) llega "Paraninfo" a quebrar cabezas y cuellos con su metal de pandemonio (escuchen a Ema Gálvez destruir su batería en esta pieza). El último tema (y mi favorito del disco) retoma algo del estilo 'horror surf' que marcó la música de los Mojarras al final de su carrera. "Zombie Love Affair" (con la participación de Dani de Madam Funtoo) es más que una simple historia de romance de ultratumba. Esta pieza es la más distante a la atmósfera general de "Crónicas del Paraíso" y seguramente de lo más experimental que ha hecho Trinky en cuanto a ambientaciones y desarrollo en una canción. Trinky, por favor, toquen esta rola siempre.
Después del ska intenso de "Hasta la mierda" (y de darle 'next' al track 7) llega "Paraninfo" a quebrar cabezas y cuellos con su metal de pandemonio (escuchen a Ema Gálvez destruir su batería en esta pieza). El último tema (y mi favorito del disco) retoma algo del estilo 'horror surf' que marcó la música de los Mojarras al final de su carrera. "Zombie Love Affair" (con la participación de Dani de Madam Funtoo) es más que una simple historia de romance de ultratumba. Esta pieza es la más distante a la atmósfera general de "Crónicas del Paraíso" y seguramente de lo más experimental que ha hecho Trinky en cuanto a ambientaciones y desarrollo en una canción. Trinky, por favor, toquen esta rola siempre.